Emblema del mal y del horror, el murciélago sufre, equivocadamente, de una muy mala reputación! Un insectívoro voraz, en el jardín es un poderoso aliado contra los mosquitos y las moscas.
Acusado a menudo de vampirismo y presagio de desgracia, el murciélago es un animal que, sin embargo, es muy útil para el hombre. Pertenece a la familia de los quiropteros (del griego cheir: mano y pteron: ala) y cuenta con más de 1000 especies distintas. Cada vez menos presente en los países occidentales, principalmente debido a la proliferación de plaguicidas, está sujeta a medidas de protección muy estrictas. En Europa se están llevando a cabo muchas acciones para promover su supervivencia, en particular el desarrollo de entradas a cuevas, campanarios y puentes bajo los cuales se instalan ladrillos huecos.
El murciélago es el único mamífero con la capacidad de volar activamente. Se mueve por el aire por medio de un ala formada por una membrana de piel entre el cuerpo, las extremidades y los dedos. Muy torpe en tierra, descansa colgando de las protuberancias de las uñas de los pies. Normalmente activo de noche, el murciélago está equipado con un sistema de dirección ultrasónico ultra sofisticado. Las ondas sonoras que emite le permiten orientarse pero también localizar insectos en pleno vuelo.
Cada hembra da a luz a una cría por año, raramente dos. Las crías son criadas sin machos en las colonias maternas. La hembra cuida a sus crías durante 6 semanas a 3 meses, dependiendo de la especie.
En invierno, cuando hace frío, los murciélagos hibernan. En primavera, salen de sus refugios para alimentarse y reproducirse. El ritmo de sueño de un murciélago durante el verano está puntuado por 20 horas de sueño boca abajo para 4 horas de caza nocturna.
Las especies europeas son estrictamente insectívoras. Particularmente voraz, un solo murciélago marrón puede capturar fácilmente 600 mosquitos por hora. En otras palabras, ¡estos animales son particularmente útiles para los humanos! Otras especies más distantes también se alimentan de frutos y sangre (de ahí su reputación de vampiros).
Los murciélagos viven en grandes colonias de casi 500 individuos. Cuando hibernan, todo su organismo vive en cámara lenta. El ritmo cardíaco desciende entonces a 1 pulso cada 3 minutos mientras que la temperatura del cuerpo baja a sólo unos pocos grados. Durante la hibernación, el murciélago bombea sus reservas de grasa para sobrevivir. ¡Un repentino despertar por la intrusión de un humano poco delicado puede ser fatal!