Hidromasaje y minipiscinas
Los beneficios del hidromasaje
Poder utilizar la bañera de hidromasaje con regularidad no solo es una fuente de relajación, sino también beneficios para la mente y el cuerpo: mientras se elimina el estrés y se olvidan las tareas del día, la piel se masajea y gana en tono y brillo. Al mismo tiempo, el hidromasaje también tiene beneficios a nivel corporal en su totalidad: los efectos positivos están mayoritariamente ligados a la acción del agua caliente y su masaje sobre los tejidos adiposos y musculares, que permiten moldear el cuerpo y hacerlo tónico. . El relajante baño en la bañera de hidromasaje también ayuda a recuperar el equilibrio después de días estresantes y agitados, ayudando a la mente a descansar y relajarse. Cuando se usa con agua fría, la acción será principalmente vigorizante para el cuerpo, mientras que el agua caliente también tendrá efectos positivos sobre la circulación sanguínea. Además, el hidromasaje también es un recurso importante contra los dolores relacionados con la artritis y el reumatismo; No es casualidad que el tratamiento esté muy extendido no solo en los centros de bienestar sino también en los balnearios. La relajación también favorece la reducción de los trastornos relacionados con el estrés, como la ansiedad y el insomnio: utilizar la bañera de hidromasaje, en definitiva, puede mejorar la salud integral.
Bañeras de hidromasaje al aire libre: limpieza y mantenimiento
Instalar una bañera de hidromasaje o una minipiscina en el jardín supone un placer infinito, ante unas pequeñas precauciones: mantener las piscinas limpias y ordenadas es fundamental no solo por motivos estéticos, sino también por motivos higiénicos así como para asegurar la máxima vida útil. palmo de la piscina de hidromasaje. Durante los períodos de inactividad, el tanque debe vaciarse de agua y mantenerse tapado con las láminas adecuadas que eviten no solo la acumulación de suciedad y residuos naturales, sino también la entrada de insectos y pequeños animales al tanque. Antes de usar es recomendable tomar una ducha, para asegurar un uso limpio y saludable, mientras que después de la estancia en el agua se recomienda reponer. La limpieza de las superficies internas debe realizarse periódicamente, con una frecuencia variable también en función de la periodicidad de uso, utilizando productos específicos que no dañen las superficies. El comerciante se encargará de orientarle en esta dirección, con el fin de obtener la máxima limpieza sin crear daños o imperfecciones.