Forsythia (o campanillas de oro) es un arbusto leñoso, caducifolio y muy floreciente. Es un híbrido de Europa, resultado de varias mezclas de plantas chinas.
Es de rápido crecimiento y sus flores aparecen en primavera, generalmente en grupos de dos a seis flores que llenan las ramas en toda su longitud.
Su tamaño es pequeño, oscilando entre 1 y 3 m de altura y hasta 5 m de ancho. Las ramas son erectas a arqueadas, con múltiples tallos delgados. Las hojas son opuestas, elípticas a lanceoladas, simples o trifoliadas y con bordes dentados.
Las flores aparecen a principios de la primavera, generalmente en grupos de dos a seis, llenando las ramas en toda su longitud (incluso antes de la aparición de las hojas).
Tienen una corola con cuatro pétalos de color amarillo dorado, afilados en la base. El fruto es una cápsula marrón seca que contiene numerosas semillas aladas.
El color de las flores diverge entre el amarillo claro y el dorado, afinándose en la base y formando pequeñas campanillas. Además, crean una especie de fruto seco marrón, que contiene numerosas semillas.
Las campanas de oro se pueden cultivar en interiores, cerca de las ventanas, pero no darán muchas flores. Lo ideal es plantarlos en suelo fértil (enriquecido con materia orgánica), bien drenable, en un lugar semisombra y con riego periódico.
Eso es porque prefieren el clima frío de invierno, ya que son plantas aptas para climas templados y subtropicales, lo que las hizo adaptarse tan bien a Brasil.
Este arbusto vigoroso de crecimiento rápido a moderado se convierte en un elemento importante en el jardín cuando florece exuberantemente. El conjunto de flores y ramas le da a la planta un aspecto de masa dorada.
Además, su follaje adquiere hermosos tonos amarillos y rojizos en otoño. La campana de oro es una planta que cambia cada estación del año, y en ella podemos observar el ciclo de vida siempre en renovación.
Se puede utilizar solo, como resalte en pequeños jardines o patios, pero su efecto tiene un mayor impacto en masas y hileras libres, a lo largo de extensos jardines.
Existen multitud de cultivares para diferentes aplicaciones, entre las que podemos destacar: ‘Arnold Dwarf’, variedad enana, ‘Spectabilis’, rústica y florífera, ‘Fiesta’, con hojas abigarradas crema y ‘Spring Glory’, adaptada a climas más cálidos.
Debe cultivarse a pleno sol o media sombra, en suelo fértil, bien drenable, enriquecido con materia orgánica y con riego periódico. La planta apta para climas templados y subtropicales, aprecia el frío del invierno.
La poda debe realizarse después de la floración. La forma natural de la planta es hermosa, pero es posible imprimirla en otra forma o estimular su densificación.
Las plantas viejas también se benefician de la poda rejuvenecedora. Debido a que toleran la media sombra, las campanillas doradas se pueden plantar en el interior, cerca de las ventanas, pero su floración no será tan abundante como la de las plantas que estarán al aire libre.
Su multiplicación puede ser mediante corte de ramas leñosas, acodo y acodo, realizado en primavera y verano.