Aeranthes arachnites Lindley es una orquídea monopodial, originaria de las islas de Madagascar y Reunión. Suele comportarse como una epífita, creciendo en las ramas de los árboles, pero a veces se la puede encontrar vegetando en las rocas (rupícola).
Ocurre en bosques desde el nivel del mar hasta altitudes de 800 m, y crece en un clima subtropical húmedo con altas temperaturas en los veranos.
Esta orquídea exótica y curiosa se parece a las del género Angraecum, en términos de crecimiento monopodial. Florece desde principios de verano hasta mediados de otoño y cada flor dura unas dos semanas.
Las flores son de color amarillo verdoso y fragantes, con los pétalos, sépalos e incluso el labio afilado en las puntas.
Se abren secuencialmente en el mismo tallo hasta el final del período de floración e incluso en años posteriores, por lo que no se debe cortar el tallo a menos que se seque.
Además, los keikis (plántulas aéreas) pueden aparecer en el tallo de la flor mientras permanece vivo, siendo una forma importante de reproducción en las orquídeas monopodiales.
Una vez que las plántulas tienen un sistema de raíces bien desarrollado, pueden separarse de la planta madre y trasplantarse a una maceta con musgo sphagnum.
Su cultivo debe realizarse con 50% de sombra, prefiriendo temperaturas entre 18 a 26 ° C, humedad relativa entre 70 a 80% y ventilación moderada. El sustrato puede consistir en piedra triturada o musgo sphagnum.
Del mismo modo que podemos utilizar una mezcla de ambos. La elección dependerá del régimen de riego que se adopte. La grava requerirá riegos más frecuentes y abundantes, mientras que el sphagnum requiere riegos menos intensos y más espaciados, ya que tiene una buena capacidad para retener la humedad.
Como regla general, el sustrato debe secarse completamente entre riegos. El entorno puede recibir una fina neblina durante todo el año, ya que goza de una alta humedad ambiental. Se sugiere realizar una fertilización foliar semanal con una solución de 2g (1 cucharada de café) de fertilizante NPK 20-20-20 por cada litro de agua.
La fertilización foliar se puede hacer diariamente si esta cantidad de fertilizante se divide por siete por cada litro de agua, sin embargo, se debe ejercer disciplina en la aplicación. Si un día se olvida la aplicación, no se debe aplicar dos veces al día siguiente, de lo contrario la planta se salinizará.
Como complemento, realizar una fertilización orgánica del sustrato una vez al mes, aplicando una cucharadita de fertilizante tipo AOSP (Viagra das Plantas), rociando sobre la superficie. Se multiplica separándolo de los keikis y sembrando.