Premisa
Características generales
La glorieta de hierro es una estructura fija y permanente. Debido a la pesadez del material con el que está fabricado, no se puede mover del lugar donde se colocó originalmente. Por este motivo es necesario evaluar cuidadosamente los espacios y decidir con mucho cuidado dónde instalarlo, ya que una vez montado en un lugar determinado, no se puede mover. Las dimensiones de una glorieta de hierro son extremadamente variables, desde modelos no muy grandes hasta modelos extremadamente espaciosos. En teoría, sean cuales sean sus requisitos de espacio, puede encontrar el modelo que mejor se adapte al tamaño que necesita. Si esto no es posible, siempre puedes recurrir a un cerrajero profesional que te lo hará a tu medida. El hierro es un material muy elegante y refinado, especialmente en su variante forjada. Una estructura de cobertura de este tipo es, sin duda, un elemento de gran impacto visual. Con el hierro, de hecho, es posible crear decoraciones y procesos altamente sugerentes que le dan a todo el ambiente una fuerte personalidad. Un cenador de hierro, por tanto, a pesar de su peso que no permite moverlo una vez instalado y ensamblado en un punto determinado del jardín, tiene, en cambio, unas líneas muy delicadas que le dan a toda la estructura una cierta ligereza que no perturba la naturalidad del paisaje pero, por el contrario, se integra perfectamente. Generalmente, la glorieta de hierro o forja se inserta en contextos en los que se ha adoptado un tipo de estilo de decoración que tiende a lo clásico o incluso a lo colonial. Lo importante es que la elección se haga en base a los elementos de decoración ya presentes en el entorno para no sobrecargar tu jardín con diferentes materiales y estilos. Esto correría el riesgo de devaluar la importancia estética de la estructura si estuviera mal colocada.
Ventajas
El cenador de hierro se puede elegir entre una amplia gama de otros materiales, como madera, aluminio. Si la elección suele recaer en el hierro, es fácil deducir que una estructura como la glorieta, así hecha, tiene más ventajas que desventajas, incluso si el gusto y las necesidades subjetivas afectan mucho la elección. El hecho es que un cenador de hierro en comparación con uno de madera es mucho menos invasivo en su forma y líneas. Es ligero y delicado y aunque no es un material natural como lo es, sin embargo, la madera no representa un elemento perturbador en el espacio abierto. El hierro es también un material extremadamente decorativo y se pueden reproducir motivos decorativos particularmente complejos e interesantes que embellecen aún más el ambiente.