Descripción de la planta
Propiedades de la planta
Toda la planta de cola de caballo es rica en minerales, especialmente silicio y potasio. Contiene flavonoides, a los que debe su efecto diurético, diversos ácidos orgánicos, resinas. En aplicación externa, la planta tiene propiedades curativas. Las principales indicaciones de la cola de caballo se refieren a: procesos degenerativos de la piel, tejido conectivo y huesos; arrugas y estrías de la piel; uñas quebradizas; flacidez mamaria; úlceras varicosas, abscesos, heridas infectadas; eczema; gota; conjuntivitis; artrosis; osteoporosis; raquitismo, fracturas, descalcificación; arteriosclerosis; edema; sangrado. Los paquetes elaborados con una decocción concentrada de cola de caballo son muy útiles en caso de celulitis u obesidad, ya que tonifican la piel flácida dándole un aspecto brillante y elástico.
Indicaciones de cola de caballo
Aplicada localmente o por vía oral, la cola de caballo tiene un notable efecto hemostático, está indicada en caso de hipermenorrea (menstruación excesiva), sangrado gástrico o bronquial. El uso de la decocción cura los tejidos sangrantes y detiene el sangrado. El silicio promueve la reconstrucción o regeneración de tejidos. Para combatir las arrugas y estrías en la piel y restaurar la elasticidad, la planta debe tomarse en decocción o aplicarse localmente. La cola de caballo tonifica los tejidos mamarios y, gracias a su contenido en silicio y su efecto depurativo, es una de las pocas plantas realmente eficaces para tratar la artrosis. No solo eso, sino que el silicio facilita la asimilación y fijación del calcio en los huesos. La planta se puede utilizar siempre que sea necesario para obtener un efecto diurético y depurativo.
Cola de caballo: preparación y uso
Para aprovechar los efectos positivos de la cola de caballo es necesario utilizarla interna o externamente, dependiendo de la dolencia que se quiera curar. Para «uso interno» la planta se utiliza como decocción y jugo fresco. La decocción se prepara hirviendo 40-50 gramos de cola de caballo en un litro de agua durante 10 minutos a fuego lento. El líquido debe filtrarse y beberse a sorbos en 3-5 tazas al día. Para el jugo, se deben beber 3 cucharadas con cada comida. Para «uso externo», la planta se presta a la preparación de compresas y tampones nasales. Las compresas se elaboran hirviendo 100-150 gramos de planta en un litro de agua; se practican localmente en el área enferma. Los hisopos nasales se hacen introduciendo una bola de algodón envuelta en una gasa y empapada en la decocción concentrada en la fosa nasal.
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