Al elegir un ramo de flores para regalar o para decorar su casa, tenga cuidado de comprobar que las flores estén suficientemente maduras y que los capullos ya muestren su color. También hay que tener cuidado de no dañar los tallos durante el transporte. Cuando llegues a casa, coloca las flores, aún empaquetadas, en el lavabo a medio llenar con agua limpia. Déjenlos «regar»: deben recuperarse del choque del transporte «fuera del agua».
Cuando las flores hayan sido restauradas, colóquelas sobre una mesa y con un par de tijeras cortadas a unos 3 cm del extremo del tallo, con un corte oblicuo, como es la costumbre para el salami. Es importante utilizar la herramienta adecuada y no, por ejemplo, las tijeras normales de cocina, porque los tallos nunca deben romperse o aplastarse, esto reduciría la duración de la flor.
Ahora puede colocar su ramo de flores en el jarrón, añadir agua, mejor si está «energizado» con la cantidad adecuada de nutrientes de flor cortada, que normalmente se encuentra en el mercado, teniendo siempre en cuenta que las hojas nunca deben entrar en contacto con el agua, porque de lo contrario la contaminarían, reduciendo así la duración de las flores.
En este punto, hay que tener en cuenta que las flores prefieren un ambiente fresco por la noche y normalmente no pueden soportar el contacto directo con la luz del sol, las corrientes de aire y la proximidad de fuentes de calor (radiadores, chimeneas, etc.). Además, hay que tener cuidado de no ponerlas nunca cerca de los frutos, lo que produce etileno y reduce fuertemente la duración de las flores.
Cada dos días añade un poco de agua limpia en la olla.