El helecho es una especie resistente. Considerada una de las plantas más antiguas del mundo, ¡lleva 400 millones de años difundiendo su encanto!
Con tanta historia, esta pequeña planta ha aprendido a adaptarse a diferentes entornos y condiciones climáticas. Sin embargo, hay algunos consejos para brindarle las condiciones perfectas para que crezca bella y saludable.
Helecho: una planta con mucha historia
Según estudios, el helecho es prácticamente un fósil viviente. ¡La investigación muestra que la planta ya existía en la época de los dinosaurios! Y aunque tiene unos pocos millones de años, este pequeño verde nunca pasa de moda.
Con sus exuberantes hojas, es una de las especies favoritas en decoración y, por ello, muchos jardineros buscan cómo cuidar el helecho en macetas o paredes. Para evitar dudas sobre el proceso, hemos separado un paso a paso.
Los cuatro consejos a continuación le ayudarán a aprender a cuidar el helecho en un instante.
1- Iluminación
Cuando pensamos en la ubicación de un jarrón, no basta con analizar su estética. Es importante saber si la planta elegida se adaptará a ese espacio. Así que el primer paso de cómo cuidar o no el metro helecho es conocer la ubicación ideal.
Debemos recordar que se trata de especies tropicales, que crecen al pie de grandes árboles. Por ello, prefieren una iluminación más suave, sin recibir directamente los rayos del sol. Por lo tanto, siempre dé preferencia a lugares bien iluminados, pero protegidos del sol.
Otro punto importante a considerar es la ventilación. A los helechos no les va bien con los vientos y prefieren lugares sin muchas corrientes de aire. Por tanto, si los vas a colocar en el balcón o cerca de la ventana, recuerda buscar un espacio con algo de protección.
2 – Riego
Como son naturales de ambientes tropicales, la humedad es un punto importante en el proceso de cómo hacer brotar las plántulas de helecho. Por tanto, el suelo debe estar siempre húmedo, pero sin acumular demasiada agua.
Por lo tanto, debe evitarse ese pequeño plato famoso debajo del jarrón. Para saber si es hora de regar, simplemente ponga el dedo en la tierra. Si sale sucio, es señal de que el sustrato está húmedo, ¡como les gusta a los helechos! Si sale seco, su billete verde necesita más agua.
La frecuencia suele ser una vez al día, pero puede variar según la temporada. Los rociadores, que se encuentran en tiendas especializadas, son excelentes para estas plantas. Distribuyen el agua de manera uniforme, dejándola húmeda y saludable.
3 – Poda
Un punto fundamental para aprender a cuidar el helecho es entender su poda. Cortar las hojas es un proceso necesario no solo para que la planta sea más elegante, sino también para fortalecer su crecimiento.
Las ramas viejas y secas consumen energía y dificultan el crecimiento de nuevas ramas. Por ello, es importante comprobar cómo cuidar el helecho americano o el helecho llorón, además de recortar las partes secas y quebradizas.
Sin embargo, este paso debe realizarse con mucho cuidado. Cortar demasiado es un gran riesgo, porque si la planta tiene pocas hojas, tendrá menos fuerza para realizar la fotosíntesis. Para evitar problemas, corte únicamente las ramas débiles y quebradizas.
4 – Fertilizante
Incluso una planta resistente como el helecho necesita un poco de ayuda de vez en cuando. Para eso, ¡cuente con fertilizantes! Para simular el entorno natural de las plantas, necesitamos nutrir la tierra con sustancias como calcio y potasio.
Cada especie necesita una determinada proporción de nutrientes para crecer de forma saludable. En tiendas especializadas se pueden encontrar abonos para helechos, preparados por especialistas y con todo lo que necesita la plantita.
Fertilizando una vez al mes, su helecho crecerá hermosa y exuberantemente.
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