Para planificar con seguridad qué variedades de plantas y flores puedes cultivar en tu jardín, es esencial conocer el pH del suelo que quieres plantar. A continuación aprenderemos a probar y medir correctamente el pH del suelo en un jardín.
Primero que nada prepara todo lo que te rodea
Antes de comenzar cualquier tipo de prueba es importante que prepares todo lo necesario para tu tarea: lava y limpia cuidadosamente todas las herramientas que usarás durante la prueba de pH. Tengan en cuenta que los utensilios sucios pueden distorsionar o adulterar los resultados obtenidos. También cuide la muestra de suelo que va a analizar, eliminando todas las impurezas y residuos de cualquier tipo. Asegúrate de que sólo quede suelo libre de componentes que puedan alterar los resultados de las pruebas que vas a realizar.
¿A qué profundidad se toman las muestras de suelo?
Si quieres saber la ubicación ideal de cada planta sólo tienes que cavar unos 2 cm bajo el nivel del suelo. Si quieres saber el índice de pH del suelo, tendrás que cavar unos 10 centímetros.
Elija el tipo de prueba que quiere hacer
Hay básicamente 3 formas diferentes de analizar el pH de un suelo: a través de un kit de suelo, usando un medidor de suelo o una sonda. Escogiendo una de las muchas pruebas caseras existentes, o enviando muestras.
Kits de tierra
Los análisis realizados a través de los kits de suelo se realizan con un tubo de ensayo al que se vierte parte del suelo que se va a analizar y al que se añade el polvo que se suministra con el kit. Todo está cubierto de agua, agitado y esperando el resultado de la prueba. El resultado se conoce en pocos minutos a través de la aparición de un color insertado en la tabla de colores del kit y donde se lee el resultado del pH.
Medidor de suelo, o sonda de pH
Estas pruebas son de lectura instantánea y se realizan insertando la prueba directamente en el suelo, o en una muestra de suelo con agua. El resultado viene en forma de un código de color o un número que indica el contenido de pH del suelo.
Pruebas caseras
Hay varias pruebas caseras diferentes que proporcionan resultados no específicos pero generalmente precisos. A través de cualquiera de las pruebas caseras disponibles se puede obtener una idea muy aproximada de si el suelo es ácido o alcalino. Algunos ejemplos de pruebas caseras son la prueba del vinagre, el bicarbonato, la lechuga roja, entre otras. El uso de pruebas caseras no garantiza un resultado 100% garantizado, pero ciertamente es mucho más fácil y barato, ya que los materiales utilizados están casi siempre presentes en cualquier despensa casera. Para aquellos que no necesitan resultados científicamente probados, las pruebas caseras son una buena opción.
Envío de muestras
Los resultados de las pruebas no siempre son concluyentes. A menudo las muestras tomadas no encajan exactamente en ninguno de los índices proporcionados por las pruebas de pH del suelo. En esas ocasiones, la mejor alternativa para disipar las dudas es enviar muestras de campo a laboratorios específicos o instalaciones hortícolas para estudios similares. Estas pruebas casi siempre se hacen gratuitamente o a bajo costo, y la autenticidad de los resultados está científicamente garantizada.
¿Y cuando ninguna de las pruebas produce alguna reacción?
Cuando se hacen varias pruebas y todas ellas no muestran ninguna reacción, entonces esto puede significar que se está en presencia de un suelo bastante neutral. Sin embargo, es aconsejable repetir los ensayos con diferentes muestras del mismo suelo, ya que a menudo sucede que el mismo suelo tiene diferentes índices de pH dependiendo de dónde se tome la muestra.
Si el resultado de la prueba es contrario a los deseos del agricultor…
No tiene sentido desanimarse aunque los resultados de las pruebas indiquen que no es un buen suelo para el jardín y las plantas. Hay formas disponibles en el mercado para cambiar el pH del suelo y ajustarlo al nivel deseado. Lo importante es saber cuál es el pH del suelo, porque es la única manera de iniciar un cultivo consciente y bien dirigido.
¿Qué índices de pH determinan la caracterización de un suelo?
Los suelos ideales para la agricultura tienen un pH entre 5,5 y 6,5. Los suelos neutros tienen un pH de aproximadamente 6,5 a 7,5. Los suelos ácidos tienen un pH inferior a 7. Los suelos alcalinos tienen un pH superior a 7. (en una escala de 0 a 14, en la que 0 representa el suelo más ácido y 14 el suelo más alcalino).
Es conveniente realizar pruebas de pH antes de empezar a plantar un jardín de flores o semillas. Sólo cuando se conozca la naturaleza alcalina del suelo será posible establecer qué cultivos crecerán allí en las mejores condiciones, o cambiar el pH de la tierra.
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