Editado por Livio Parietti
Una al día aleja al doctor. Guillermo Tell es famoso por apuñalar a su hijo en la cabeza con una. Blancanieves lo convirtió en una enfermedad… aunque es un símbolo de salud. Nueva York es la más grande. A Newton se le cayó una en la cabeza. Si es el logo de una famosa marca de ordenadores… Sí, lo tienes. Hablemos de la manzana.
De hecho, del manzano, que, como el peral, pertenece a la familia de las rosáceas . Hay alrededor de siete mil variedades de manzanos.
Florece entre abril y mayo, pero ten cuidado al hablar de la fruta. Consideramos las manzanas como tales, pero técnicamente el fruto es el núcleo , que se llama poma.
El manzano es una planta bastante robusta que, en el jardín, además de ser generosa en la fructificación, es espléndidamente decorativa durante la floración.
Para plantar un manzano hay que cavar un agujero adecuado al tamaño de las raíces de la planta y, después de colocar el manzano y rellenar el agujero, hay que compactar la tierra y regarla abundantemente.
La primera humectación ayuda a que el suelo se adhiera a las raíces. Será importante mojar el nuevo manzano todos los días durante todo el primer mes.
Para evitar la rápida evaporación del agua, es aconsejable cubrir la tierra alrededor de la planta con paja; esto también evitará el crecimiento de malas hierbas.
El suelo debe ser rico en sustancias orgánicas : podemos utilizar un compostaje de producción propia, o unas cenizas de madera ricas en potasio, o un estiércol rico en nitrógeno.
La fructificación tendrá lugar 2 o 3 años después de la plantación. Las manzanas estarán maduras cuando el tallo (o el peciolo) permanezca unido a la fruta.
El manzano: poda y cosecha
El manzano se poda de dos maneras: la poda de producción , que no es muy exigente, y la poda de cría para dar forma a la planta.
En cualquier caso, nunca es aconsejable exagerar con la poda de un manzano. Limítate a adelgazar el follaje para mantener la forma que deseas y eliminar algunas ramas internas para que el aire y el sol también puedan circular dentro del follaje.
La cosecha del fruto va de agosto a octubre, dependiendo de la variedad. Es una buena idea dejar de regar un mes antes de cosechar, así las manzanas sabrán mejor.
La temperatura no es un problema para el manzano, que puede soportar hasta veinte grados bajo cero. Por otro lado, no le gusta nada el viento.