Podar la menta es una tarea agradable, ya que las plantas liberan una nueva ráfaga de fragancia a menta con cada corte que haces. Tiene dos objetivos al podar la planta: mantener el lecho sano y evitar que florezca y se vaya a la semilla. La floración reduce la calidad y la potencia de las hojas. Siga leyendo para saber cuándo y cómo podar las plantas de menta.
Nunca tenga miedo de pellizcar unas cuantas ramitas de menta cuando las necesite, pero si necesita una gran cantidad de menta, espere hasta el momento de la poda. Si desea un lecho de menta de bajo crecimiento, puede mantenerlo tan corto como 4 cms. Esta es una buena altura para la menta cultivada en recipientes pequeños. De lo contrario, déjela crecer de 8 a 12 cms de altura antes de podarla.
Cuándo podar la menta
A veces se puede obtener una cosecha ligera de menta durante el primer año, pero por lo general es mejor esperar hasta el segundo año, justo antes de que las plantas florezcan. Después de que la menta florece, pierde algo de su aceite esencial, lo que hace que las hojas sean menos fragantes y sabrosas. Preste atención a los brotes que indican cuando la planta está a punto de florecer. Una vez que aparecen los brotes, puede pellizcarlos o cortar las plantas. Durante el segundo año, puede cortar las plantas dos o tres veces.
Recortar las plantas de menta en el suelo antes del invierno es una parte esencial de la prevención de plagas de insectos y enfermedades, como la antracnosis, que de otro modo pasarían el invierno en las plantas.
Cómo podar la menta
Si está podando la menta durante la temporada de crecimiento, reduzca las plantas a la mitad. Esto eliminará las puntas de la planta donde de otro modo florecerían las flores y proporcionará suficiente menta para uso fresco, para congelar o para secar.
Cuando realice la poda de plantas de menta al final del año o al final de la temporada, córtelas a una cm del suelo. Si tiene un lecho grande, puede usar una cortadora de césped.
